Se supone que una reparación es para aliviar , reparar, males que alguien ocasionó.
En el caso de la ley 18033, asegurar una vejez sin sobresaltos a quienes fueron presos políticos y estuvieron encapuchados y torturados en los cuarteles y campos de concentración de la dictadura militar que sufrimos los uruguayos de 1973 a 1985.
Sin embargo hoy decenas de uruguayos están viviendo la zozobra de que se los llame en las mañanas de los sábados (¿no tienen otro día para llamar?) para anunciarles un mazazo tras otro : que se les quitan sus ingresos, y que se les pasan cuentas a pagar por cifras fabulosas.
¿Cuál es el espíritu? ¿ Ayudar a los que sufrieron la dictadura o volver a torturarlos de otra manera, haciéndolos pasar fines de semana angustiados con qué nueva sorpresa les espera cuando lleguen al cuartel de los nuevos torturadores del BPS?
POR UNA VERDADERA LEY REPARATORIA PARA LOS EX -PRESOS POLÍTICOS Y EXILIADOS, NO LA 18033 QUE IMPIDE TRABAJAR O JUBILARSE
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